Un pozo que se rebosó por las fuertes lluvias y la desviación de una quebrada habrían sido las causas que originaron la emergencia el pasado jueves en la noche.
"En la parte alta encontramos unos jagüeyes y estos en su momento estaban llenos y empezaron a rebosar. También vemos que en la quebrada hubo una desviación pero eso es materia de investigación, y estamos haciendo todos los requerimientos y procedimientos correspondientes", explicó Juan Gabriel Álvarez, director de la CAR de Santander.
Mientras las investigaciones avanzan, los habitantes de San Gil intentan retornar a sus actividades cotidianas. Las calles del barrio Paseo del Mango comienzan a despejarse y en algunas casas ya se pueden habitar.
Mientras tanto, familiares y amigos del Johan Sneyder, el niño que murió tras la caída de un muro, le dieron el último adiós.
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En medio del dolor, habitantes del municipio piden que se esclarecen las causas de la emergencia para evitar que tragedias como esta se repitan.
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