Cuatro sujetos armados, que se identificaron como miembros de una fuerza del Estado, llegaron hasta la finca del ganadero Andrés Herrera y lo secuestraron .
Tras amordazar a los empleados, se lo llevaron con rumbo desconocido. Recorrieron varios kilómetros en el vehículo de la víctima y en medio de las montañas incendiaron el carro.
El Ejército y el Gaula iniciaron la búsqueda de los plagiarios y su víctima, pero hasta el momento las operaciones han sido infructuosas.
El ganadero Andrés Herrera es suegro del director de la oficina de atención a víctimas del Cesar, Víctor Hugo Mosquera.