En 2021, en medio de una necesidad económica, la profesora Cecilia Lora, quien reside en San Pedro, Urabá antioqueño, solicitó un crédito por casi 25 millones de pesos a una entidad financiera, quedó pagando cuotas de $725.000 mensuales, pero tiempo después, cuando iba a pagar el total de la deuda se llevó una desafortunada sorpresa.
“A mí me llega a mi cuenta 24.300.231 pesos y resulta que un año después, cuando yo pido ese certificado de deuda por $40.300.000, inmediatamente yo me doy cuenta de la situación”, recordó la profesora.
Desde ese momento empezó una odisea para su vida, porque en el camino se encontró con que debía más de lo que ya le había aparecido.
“Cómo es que cuando la Secretaría de Educación me envía el soporte de la libranza, dicha libranza se encuentra por 87 millones de pesos. Ahí sí fue una situación que rebosó todos los límites”, añadió Lora.
En su búsqueda de justicia llegó a la página de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), demandó y finalmente hubo audiencia.
“Llegó el día de la audiencia donde tuve realmente la justicia que esperaba. Finsocial (entidad que le cobró de más), luego de todo el perjuicio y todo el daño, tiene el descaro de apelar una decisión de un juez cuando hay toda una prueba”, recalcó la mujer.
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La Superintendencia de Industria y Comercio falló a favor de la profesora y ordenó la suspensión de descuentos por nómina, la reliquidación de la deuda y la devolución del saldo a favor.
Además, se ordenó el traslado de la copia del expediente para que Finsocial sea investigada por fallas en la información y cobros indebidos. La empresa tiene 30 días hábiles para cumplir las órdenes de la sentencia.
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Por su parte, la profesora espera que la justicia siga obrando a favor de sus derechos.
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