En plena pandemia por el COVID-19 y con las unidades de cuidados intensivos ocupadas en más del 80 por ciento, varios hinchas del América celebraron el triunfo por las calles del municipio de Bello.
Las aglomeraciones y la falta de protocolos de bioseguridad ganaron terreno y se metieron un autogol.
Y si en Bello llueve, en Medellín no escampa, más de 300 fiestas fueron controladas por las autoridades durante las noches del 26 y 27 de diciembre, donde al parecer el único que no asistió a la aglomeración fue el tapabocas.
“Uno se encuentra que no solo está el núcleo familiar, hay tres o cuatro personas que llegan desde otros hogares, esto es lo que aumenta el contagio”, aseguró el coronel Daniel Mazo, comandante operativo de la Policía Metropolitana.
Publicidad
“En Medellín estamos experimentando un incremento nuevamente de casos relacionados con las interacciones sociales que se han aumentado por las actividades decembrinas”, indicó Natalia López, subsecretaria de salud de Medellín.
Para los expertos en epidemiología, estos actos de indisciplina y relajamiento del cumplimiento de las medidas podrían pasar cuenta de cobro en el 2021, lo que llevaría a nuevas restricciones a la movilidad.
Publicidad
“La magnitud de ese impacto lo estaremos observando en enero, lo cual puede ser preocupante y esto se traducirá en un número mayor de contagios diarios, de ingresos a hospitalización y lamentablemente un incremento en la ocupación de las camas de unidades de cuidado intensivo”, señaló Yessica Giraldo, epidemióloga.
Para este lunes, Antioquia registra una ocupación en las UCI de un 76,6 por ciento. En las últimas 24 horas se registraron 1.363 nuevos casos en el departamento y el acumulado de víctimas mortales ya llega a 4.683.