Transmilenio, imperio de las ventas ambulantes

La situación de los vendedores en Transmilenio ha tocado fondo. Una de estas personas dedicadas a la venta de productos en inmediaciones del portal de la calle 80 asegura están tan organizados y son tantos, que incluso han debido instaurar una especie de “pico y placa”.

La problemática, más que de la capital es nacional. La informalidad laboral, según el DANE, afecta a cerca de la mitad de la población trabajadora en el país. En Bogotá, de acuerdo con el Instituto Para la Economía Solidaria (IPES)  hay 48 mil comerciantes informales.

Uno de estos casos es el de Jorge Carrillo, quien perdió su empleo de vigilante hace ocho años. Ahora tiene 60 años y nadie le da trabajo. Por eso, encontró en la informalidad una forma de ganarse la vida decentemente.  El asegura que solo busca ganarse la vida sin hacerle daño a nadie.

Sin embargo, para otros, se trata de un tema problemático. “Desorden llama desorden: es contagioso. Robos, colados, vandalismo, ventas ambulantes, abuso a mujeres, más y más problemas”, refiere Dario Hidalgo, experto en temas de movilidad y urbanísticos.