Medellín vivió una de las alboradas más grandes en los últimos años dejando tres personas quemadas.
Para algunos fue un espectáculo de luces y fuegos pirotécnicos que le daban la bienvenida a diciembre, mientras otros eran testigos de una noche estruendosa que irrumpió en la tranquilidad y desafió las prohibiciones.
El balance de la noche fue de 2 niñas de 11 y 14 años y un joven de 20 años que resultaron quemados en calidad de espectadores.
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“Tenemos una de las menores hospitalizadas con una lesión completa de su tímpano y los otros dos en manejo ambulatorio con quemaduras en el muslo y en la mano”, indicó Natalia López, subsecretaria de Salud de Medellín.
El alcalde Daniel Quintero advirtió duras sanciones.
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“Va a haber sanciones penales para quienes dejaron quemar a sus hijos, porque ellos los quemaron, así haya sido otro, ellos los quemaron porque dejaron que los niños estuvieran cerca a la pólvora”, insistió el mandatario.
Las mascotas o animales de compañía también pasaron su peor noche.
Además, la Policía en el área metropolitana no dio abasto por 79 riñas, 46 casos de violencia intrafamiliar e intervino 336 fiestas por alto volumen, 256 de ellas en Medellín.
“Se logró en el área metropolitana la incautación de 101 kilos de pólvora. Se hicieron 22 comparendos en Medellín, 32 a nivel metropolitano por tenencia de estos elementos y otros comportamientos contrarios a la convivencia”, dijo el coronel Daniel Mazo, comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá.
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Autoridades hicieron un llamado sobre el comportamiento en la temporada decembrina, ante el coronavirus que sigue presente y causando decenas de muertes a diario.
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