Ashton Kutcher se sometió a una dieta estricta para interpretar en una película el papel de Steve Jobs, el fallecido cofundador de Apple, creador del iPhone y el iPad.
En 2012, para caracterizar al filántropo norteamericano, el actor inició un proceso de transformación desde dejarse crecer el bigote y la barba hasta la pérdida de peso. La dieta extrema fue a base de frutas y verduras.
Ashton Kutcher estaba tan obsesionado por convertirse en el doble del magnate de la tecnología que la llevó al extremo provocándole pancreatitis.
Así lo reveló su esposa Mila Kunis, quien dijo que al final Ashton solo comía uvas y que esto le costó dos idas a urgencias en el hospital.
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