En Colombia no se habla igual en todas partes. Cada región tiene su propio ritmo, sus giros y un arsenal de palabras que reflejan la forma de ver la vida. En la Costa Caribe, donde el calor, el mar y la picardía marcan la cotidianidad, el español se llena de expresiones únicas que pueden desconcertar a quien no esté familiarizado con ellas, pero que son esenciales para entender el sabor de la cultura costeña.
El Caribe colombiano está lleno de diminutivos y aumentativos cargados de significado y que se usan en el día a día entre los habitantes, pero que pueden dejar 'perdidas' a muchas de las personas de otros puntos del país. En la calle, el saludo breve y directo es un 'ajá', mientras un cipote carro, casa o fiesta es algo grande, descomunal.
Lista de algunas frases y palabras costeñas:
- Abrir (se): alejarse. Separase del grupo. (Ábrete que no te queremos. yo me abro ya…)
- Achicopalao: perturbado, enfermo.
- Aguacatao: persona aburrida, decepcionada.
- Ajá: 1) saludo corto. 2) mostrar aprobación, afirmar.
- Añoñi: ¿que no? Expresión de seguridad ante algo dudoso.
- Apué: (ah, pues)
- Apiñao: apretado.
- Arrayúo: persona que muestra interés exagerado por algo.
- Arrebatao: loco, persona desordenada o loca.
- Arrestao: atrevido, persona con carácter.
- Avispado: persona más activa.
- Bacano: Bueno, chévere, agradable.
- Barro: mal (¡ey, barro eso!)
- Billullo: dinero (de billete)
- Bochorno: Vergüenza.
- Boli: Jugo (zumo) de fruta congelado que se vende en bolsitas de plástico transparente.
- Bolita: el chance, sorteo basado en los resultados de la lotería oficial. Ej: me gane la bolita.
- Bollito: chica atractiva.
- Bollón: Persona creída.
- Cachetoso: elegante.
- Cagársela: equivocarse, cometer un error grave.
- Calidad: expresión amable para pedir un favor a una persona desconocida (“Ey, calidad, ¿qué horas tienes?”)
- Calilla: persona intensa. Resto de un cigarro.
- Camello: trabajo, ocupación.
- Cara e’ queso: borracho, peao.
- Carrandanga: cantidad de eventos o cosas.
- Carreta: mentira, historia inverosímil.
- Cascar: pegarle a una persona.
- Chambón: de mala calidad, tosco, rústico.
- Chance: (hacer el…) aventón, llevar a alguien con el carro, ej: “hey, hazme un chance hasta la 51b”
- Chancletas: sandalias.
- Chapeto: medio borracho.
- Chévere: bueno, agradable, súper.
- Chicharrón: problema, algo muy difícil.
- Chuchería: golosina.
- Cipote: aumentativo, palabra que significa grande.
- Cola: rabia. (Me das cooola..!)
- Coleto: persona de mala apariencia.
- Combo: grupo de personas, patota.
- Corroncho: ordinario, tosco, sin estilo.
- Cuadrarse: iniciar una relación amorosa con alguien.
- Cuadro: compañero, amigo, persona cercana, conocido.
- Cucayo: pegao, resto de arroz que queda pegado en el fondo de la olla en que se cocina.
- Cule (culo de): Interj. Que muestra emoción en lo dicho. (¡Cule carro! > ¡Qué carro tan bueno!, cule vaina jopo > que cosa tan mala/desagradable)
- Cule de pava: tener flojera, sin hacer nada.
- Deja el güiro: deja el chisme.
- ¡Del carajo!: muy bueno.
Más allá de su humor y musicalidad, este vocabulario refleja cómo el Caribe colombiano interpreta el mundo: con espontaneidad, exageración, picardía y cercanía. Al final, estas expresiones no son simples palabras, son piezas de identidad que viajan con los costeños a cualquier parte del país o del mundo, recordándoles que su forma de hablar es también su forma de vivir.
MARÍA PAULA GONZÁLEZ
PERIODISTA DIGITAL DE NOTICIAS CARACOL