Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
El exministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, está salpicado en el escándalo de corrupción de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo (UNGRD) debido, principalmente, al testimonio y las pruebas aportadas por su antigua asesora, María Alejandra Benavides.
Benavides, quien fue imputada por las autoridades en este entramado de corrupción, firmó un acuerdo de colaboración con la Fiscalía General de la Nación y se ha convertido en la principal testigo contra su exjefe. La fiscal Luz Adriana Camargo confirmó, este martes 25 de noviembre, que se tomó la decisión de hacer una solicitud de imputación contra Bonilla, la cual será radicada este mismo miércoles.
A Bonilla se le imputaría el delito de tráfico de influencias.
La clave de la vinculación de Bonilla, de acuerdo con los testimonios de Benavides, reside en un supuesto plan para sobornar a congresistas a cambio de la aprobación de créditos internacionales de la nación o un cupo de endeudamiento. Según la versión que Benavides reveló a la Fiscalía en noviembre de 2024, el exministro Bonilla tenía conocimiento de este plan ilícito.
La exasesora relató ante el ente investigador que “él (Bonilla) sabía que esos contactos eran de políticos y de contratistas. Él sabía que esos contactos los había sacado yo de lo que me habían pasado los congresistas que tenían los cupos indicativos. Yo no le puedo decir mentiras a ustedes”.
Publicidad
De acuerdo con la Corte Suprema de Justicia, funcionarios del alto gobierno habrían realizado promesas a seis congresistas integrantes de la Comisión de Crédito Público a cambio de conseguir conceptos favorables para la nación. Estas promesas, que se cumplirían a través de la UNGRD, se materializarían en contratos para proyectos específicos.
En desarrollo...
NOTICIAS CARACOL