Las madres de la naturaleza siempre hacen gala de su instinto y dejan conmovedoras postales como la captada por el fotógrafo Paul Nicklen. En esta oportunidad, las protagonistas son una ballena jorobada y su cría.
El escenario de esta tierna escena fue Tonga, un país de Oceanía conformado por más de 170 islas del Pacífico Sur.
La secuencia, publicada por National Geographic, muestra a la ballena jorobada y a su cría dando un paseo. Eso sí, la hija de este enorme ejemplar permanece bajo el cuidado de mamá, que se encarga de espantar cualquier depredador al acecho.
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"Mientras Paul descendía a la profundidad para capturar el momento, el canto de una ballena macho distante llenó las aguas. El fotógrafo filmó todo el tiempo que pudo, se despidió en silencio y flotó suavemente hacia la superficie”, señaló la publicación.
Para los humanos, esta práctica no solo pone en peligro sus vidas por la presencia de potenciales depredadores, también provoca molestia en los pulmones debido a la falta de oxígeno. A pesar de esto, encontrarse escenas como la de la ballena jorobada hace que valga la pena.
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"Paul dice que hay algunas inmersiones en las que la experiencia es tan fascinante que puede olvidarse de la sensación de ardor en los pulmones. Esta fue una de ellas”, indicó National Geographic en un video que supera los 4 millones de reproducciones en 48 horas.
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