Los padres de Raygen y Harper, de 11 y 6 años, quisieron darles la sorpresa y llegaron a casa con la bebé en brazos. La emoción se apoderó de toda la familia.
El matrimonio de Kasy y Shane Pruitt mantuvo en secreto la adopción de Kelsey-Marie hasta el último momento.
Todos los trámites se realizaron de la forma más sigilosa, para que ninguno de sus hijos se enterara antes del día de la presentación oficial.
Ya en la puerta de su casa, en Texas (EE. UU.), la pareja comenzó a grabar con su celular lo que sería este momento inolvidable.
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Sonrisas, lágrimas y gritos de felicidad inundaron el hogar de los Pruitt.
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Lo mejor de la historia se resume en la siguiente fotografía familiar: Kasy y Shane posan junto a sus dos hijas biológicas y sus dos hijos adoptivos, uno de ellos con condiciones especiales. Kelsey-Marie será la quinta integrante.
La adopción es y será siempre uno de los más genuinos actos de amor de los seres humanos.
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