La pareja aplazó su viaje de Inglaterra a Mallorca luego de que su mascota destrozara los pasaportes de sus tres hijos.
A menos de 4 días de las vacaciones, Ella Arundell y su esposo, Russell Mack, habían pagado 2.500 libras esterlinas (9´500.000 de pesos) por el plan.
Entre el paquete de viaje, tenían calculado que la compañía les ayudara con la decoración para celebrar el cumpleaños de su hija Erin, de 9 años y Harry, de 2 años.
En una entrevista para el diario Daily Mail, Arundell aseguró que quería dejar todo arreglado y dejó los documentos sobre una mesa, pero lo que nunca se esperó fue que Bailey, su perro, fuera a hacer una travesura.
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A la mañana siguiente, Russell escuchó ruidos mientras bajaba las escaleras y se llevó una sorpresa al ver al animal comiéndose los pasaportes.
“No vamos a ir de vacaciones”, dijo Ella luego de que su marido subiera a contarle lo ocurrido.
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Trataron de pegarlos con cinta y los llevaron hasta el aeropuerto para ver si todavía servían. Desafortunadamente, la agencia les dijo que necesitaban nuevos documentos y que estos tomarían un tiempo.
Con lo sucedido, la pareja tuvo que pagar 1.000 libras esterlinas (unos 3´800.000 de pesos) a la compañía para reprogramar su viaje.