Mattea Goff retrató de forma cómica cómo eran las noches de desvelo con su bebé mientras su marido dormía plácidamente.
Un día, el esposo de Mattea no entendía por qué se había levantado de mal humor, así que ella decidió empezar a hacer “garabatos” que se convirtieron en algo divertido y con lo que algunas madres también se han identificado.
Los dibujos la muestran amamantando a su bebé a mitad de la noche, viendo cómo vomita en la cama, desabrigada porque su esposo se queda con todas las cobijas, recibiendo patadas de la niña que se acomoda en el lecho y despertando con moretones y frío mientras su compañero se despereza relajado.
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Mattea, sin embargo, defiende a su marido y dice que siempre se ha involucrado en la crianza de sus dos pequeños.
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Los dibujos con su hija Aurora, de 5 meses, se han hecho virales.