A aguas venezolanas ingresó el Fortune, cargado de combustible y aditivos para el país suramericano.
Las imágenes se conocieron después del anuncio hecho por el ministro del Petróleo, Tareck El Aissami, en Twitter. Más tarde, la embajada de Irán en Venezuela confirmaba el arribo con el mensaje de bienvenida enviado por un tripulante del barco de la Armada venezolana, que escoltó el ingreso de la nave.
“Agradecemos y apreciamos infinitamente el apoyo recibido por la hermana república islámica de Irán”, dijo el tripulante de la embarcación.
Este barco y los otros cuatro que están en camino llevarán a Venezuela cerca de 1,53 millones de barriles de gasolina.
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El viaje de estas embarcaciones ha generado tensiones diplomáticas con Estados Unidos, nación que mantiene fuertes sanciones a las exportaciones de crudo entre Venezuela e Irán, dos países con estrechas relaciones diplomáticas desde el mando del fallecido Hugo Chávez.
Entre tanto, en las calles de Caracas ya se ven filas en las estaciones de servicio, a la espera de este combustible.
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Venezuela enfrenta una dura caída en la producción de petróleo por cuenta de sanciones internacionales y la insuficiencia de abastecimiento en las refinerías estatales.