El tubérculo, que tiene altos niveles de cianuro, fue comprado a un vendedor ambulante. Denuncian que cada vez es más consumida ante escases de alimentos.
Las víctimas son tres hermanos de 53, 57 y 63 años, más un sobrino de 19. Ellos compraron el alimento sin saber que se trataba de un letal tubérculo.
Los miembros de la familia Cruz Durán, oriunda de Cúcuta, fueron llevados a centros médicos en Caracas pero no lograron ser salvados.
Allegado a los fallecidos aseguran que los sitios no contaban con medicina para contrarrestar los nocivos efectos del cianuro que contiene la yuca amarga.
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En lo corrido de 2017, al menos cuatro niños han muerto intoxicados por comer el tubérculo.