
Kayla Blake fue arrestada después de reportar falsas amenazas de bomba en el trabajo de su novio para pasar más tiempo con él.
Las falsas amenazas de bomba fueron hechas a una fábrica de productos médicos ubicada en Pittsfield, Estados Unidos.
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De acuerdo con el jefe de la Policía de Pittsfield, Harold Bickmore, la mujer hizo dos amenazas el jueves pasado: una a las 9:00 a.m., en la que llamó a una estación policial diciendo que iba a poner una bomba en la fábrica, y otra, dos horas después, cuando la sospechosa manifestó que pondría cuatro bombas cerca de la planta.
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Las autoridades rastrearon las llamadas hasta la ciudad de Etna, donde vive Kayla Blake, e interrogaron a la sospechosa, que confesó todo y dijo que no tenían ninguna bomba. Fue arrestada y acusada por un delito grave de terrorismo.
Las amenazas obligaron a cerrar las instalaciones de dos fábricas de la misma empresa, donde trabajan cerca de 400 personas, según informó el medico local Portland Press Herald.
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