Fueron obligadas a desnudarse y mostrar su ropa interior para comprobar si tenían su periodo, lo que las convierte en unas parias con respecto a sus compañeros.
El hecho ocurrió el pasado martes 18 de febrero, en la ciudad de Bhuj, en el instituto Shree Sahajanand Girls (SSGI), el cual es dirigido por la secta Swaminarayan, un grupo hindú conservador.
En ese lugar, 68 jóvenes fueron obligadas a salir del salón de clase para luego dirigirse al baño, donde les mandaron a quitarse su ropa íntima y así poder ser inspeccionadas.
Las jóvenes, que residen en un albergue en Gujarat, estado al oeste del país, se quejaron de la situación.
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La inspección ocurrió porque se recibió una queja, el lunes 17 de febrero, de un funcionario del albergue dirigida al director de la universidad donde expresaba que algunas estudiantes estaban infringiendo las reglas que deben seguir en esta secta las mujeres cuando tienen su menstruación.
Esta normativa indica que las mujeres no pueden entrar a un templo, ni a la cocina, tampoco tocar a otros estudiantes cuando tienen el periodo menstrual.
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Además, al momento de comer deben ser ubicadas lejos de los demás, lavar sus propios platos y en cuanto al salón de clase deben ubicarse en la última fila.
Obligadas a contar cuando menstrúan
Una de las afectadas le dijo a la BBC que en la residencia tenía que llevar un registro, donde se escribía el nombre cada vez que tenían la regla y de esta manera fueran identificadas por las autoridades.
Pero desde hace dos meses ninguna estudiante se anotó en la lista. Por esta razón el funcionario del albergue decidió quejarse con el director de la universidad, quien al día siguiente aplicó represalias contra las menores.
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Las jóvenes señalan que fueron abusadas antes de ser obligadas a desnudarse. Las mujeres calificaron lo ocurrido como “una experiencia muy dolorosa” y “tortura mental”.
¿Qué hicieron?
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Un grupo de ellas decidió organizar una protesta el pasado jueves y exigió medidas contra las autoridades de la universidad.
Algunas de las afectadas mencionaron que están presionadas por las autoridades de la academia para que no hablen del incidente.
Un miembro del consejo administrativo de la institución, Pravin Pindoria, calificó el hecho como “desafortunado”, agregó que se tomaría medidas contra los implicados y ordenó una investigación.
Por otro lado, Darsha Doholakia, vicecanciller de la universidad, culpó a las estudiantes y argumentó que ellas habían violado las reglas.
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Finalmente, la Policía presentó una denuncia y la Comisión de Mujeres del Estado de Gujarat ordenó el pasado viernes una investigación del suceso e incentivó a las estudiantes hablar de lo ocurrido sin temor.