En Portugal, el Gobierno del partido socialista aprobó nuevas leyes que buscan beneficiar a los empleados que, por el COVID-19, han tenido que realizar trabajo en casa.
A partir de ahora, en el país luso será ilegal llamar a los trabajadores después de concluida su jornada laboral.
Las nuevas leyes fueron aprobadas tras las constantes quejas de los trabajadores, quienes afirman que desde que trabajan en casa tienen menos privacidad y más inconvenientes.
Otra de las leyes que fueron aprobadas tiene relación con los empleadores. Estos deberán pagar a sus empleados por el aumento de los gastos, como las facturas de gas, internet y electricidad, incurridos mientras trabajan desde casa.
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Por último, una de las leyes que más beneficiaría a los padres cabeza de hogar indica que los empleados con hijos recibirán protección legal para realizar trabajo en casa hasta que sus hijos cumplan 8 años, sin tener que obtener la aprobación de la gerencia, informó el medio Independent .
Estas medidas fueron aprobadas con el fin de llamar nuevas personas interesadas en trabajar en Portugal y también garantizar la completa seguridad y tranquilidad para quienes residen en el país.
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