Miles de ciudadanos deben esperar meses y sufren incomodidades para obtener el documento, necesario para abandonar el país.
Siudy Quintero es la única de su familia que queda en Venezuela. Tenían una heladería en el Zulia y emigraron a España por la crisis eléctrica y el deterioro de todos los servicios públicos. Tuvo que viajar a Caracas para intentar obtener su pasaporte, luego de un año esperando.
“Sola, sola, sola. Ayer cumplí años y me vine aquí a venir a retirar, a hacer cola. Yo tenía mi empresa, tengo mi casa, tengo todo aquí pero me estanco, soy profesional, pero estoy estancada”, dice.
Como ella, miles de venezolanos cuyos trámites quedaron congelados por fallas en el sistema tienen que pasar hasta tres días en esta sede del Servicio de Extranjería para poder ser atendidos.
Publicidad
“Tuve que dormir aquí con muchísimo miedo, porque uno no sabe en qué momento te atracan”, relata Carolina Suárez, otra ciudadana.
La mayoría está sacando los papeles de una u otra manera porque se van fuera del país.
Publicidad
La hiperinflación que continúa pulverizando el salario es una de las principales razones que esgrimen y de la que no se salvan ni los empleados públicos.
En el Banco Central de Venezuela los trabajadores que anteriormente tenían los mejores ingresos protestaron exigiendo salarios justos.
La migración de profesionales está ocasionando un problema al país; según la federación médica, 26 mil médicos han emigrado de Venezuela en los últimos años.