Las dueñas de los animales afirman que el conductor podía atravesar la vía sin causarles daño, pero “decide cruzarse y atropellarlos”. Dos de las mascotas murieron.
Coco, que habita en la calle y es muy querido por la comunidad, fue auxiliado por vecinos que tuvieron que cortar la larga ballesta para trasladarlo al veterinario.