Cinco de las seis gobernadoras en Colombia asisten al Congreso Internacional de Derechos Humanos y Género que se realiza en Barranquilla, capital del departamento del Atlántico. Algunas de ellas confesaron la forma en la que han sido víctimas de violencia en medio de sus gestiones cotidianas.
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Las mandatarias departamentales aseguran que padecen violencia política y que cuando se habla de ellas en las redes sociales les dicen que se tienen que ir a la casa a hacer los oficios. Además, denuncian que la situación viene desde las mismas mujeres.
“Lamentablemente, el liderazgo no se les ha permitido a las mujeres. El machismo es muy marcado en nuestras regiones, en el departamento del Meta, desafortunadamente, el machismo es muy fuerte. Cuando una mujer aspira a algo, los comentarios en las redes sociales son ‘por qué no se va para la casa a criar a los niños’”, indicó Rafaela Cortés, gobernadora del Meta.
“Es muy triste ver cómo entre nosotras nos rechazamos. Somos nuestras primeras enemigas y qué triste. Así no vamos a seguir conquistando espacios si no somos capaces de reconocernos”, aseveró Elvia Milena San Juan, gobernadora del Cesar.
“Donde viven nuestras mujeres rurales, nuestras mujeres empobrecidas, sin formación académica, sin empoderamiento económico. Hay un fiscal, hay un defensor, hay un juez, ¿dónde está la función pública para poder garantizar el acceso efectivo a la justicia?”, agregó Nubia Carolina Córdoba, gobernadora del Chocó.
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Las gobernadoras, además, señalaron que es de vital importancia creer en las propias mujeres y que los hombres valoren el esfuerzo que ellas hacen día a día. Y, sobre todo, la lucha que han tenido que librar.
Asimismo, dicen que la segregación está vigente, pues ellas creen que deberían ser más de seis gobernadoras en Colombia.
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