El levantamiento del examen preliminar por parte de la Corte Penal Internacional al Estado colombiano causó un nuevo enfrentamiento entre el presidente de la República,Iván Duque, y el presidente de la JEP, Eduardo Cifuentes.
El primer mandatario insistió en que, al levantar la vigilancia preliminar sobre Colombia, la CPI respaldaba al país y no a una institución en especial: “¿El acuerdo en los considerandos qué reconoce? Primero, el trabajo de la justicia ordinaria, un gran respaldo a la justicia ordinaria de nuestro país. Segundo, hace un reconocimiento a justicia y paz (…) y también le da un espaldarazo a la Justicia Especial para la Paz sobre la base de las expectativas, que hoy existen, porque todavía no hay condenas”.
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El pronunciamiento generó otra reacción desde la JEP. Su presidente, Eduardo Cifuentes, pidió que se reconozca el trabajo de esa jurisdicción: “yo no entiendo en realidad la personalidad del presidente de la República, porque en el mismo texto que él suscribe se reconocen los logros recientes de la jurisdicción y en otra parte él entiende que esta es una entidad apenas aspiracional”.
Cifuentes llamó al primer mandatario a cumplir con exactitud el acuerdo con la CPI: “invito a dejar de lado el infantilismo y más bien cumplir claramente esas condiciones de apoyo a la jurisdicción y seguimos adelante”.
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El presidente Iván Duque, entre tanto, insistió en que la JEP debe mostrar resultados en materia de justicia, reparación y no repetición.
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