Un niño de Sidney, Australia, desarrolló una grave infección tras acudir a la peluquería para que le hicieran un corte de cabello moderno. Había decidido arreglárselo justamente para el 4 de septiembre, día en que cumplía años.
Días después, este menor empezó a experimentar la presencia de hongos en la cabeza, los cuales le causaron sarpullido y una piquiña insoportable.
Aunque la madre del pequeño llamó a la peluquería para quejarse, le dieron una insólita respuesta: era la tercera persona que se comunicaba para avisar algo así, pero no le ofrecieron alguna solución. “Me sorprendió su actitud arrogante", le contó al diario Daily Mail.
La mujer rechazó haber recibido una breve disculpa y no un reembolso u otra compensación.
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La infección desapareció con tratamiento médico, pero el niño de 11 años tuvo que soportar la incomodidad que le producía la picazón, además de la vergüenza de que vieran su cabeza con las protuberancias.
La mamá publicó imágenes en Facebook para alertar a otros padres de tener cuidado con los sitios a donde llevan sus hijos a la hora de cortarse el cabello. Pidió tener precaución especial en los elementos de desinfección.
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El gerente de la barbería señaló que este tipo de situaciones son comunes en estos sitios, pero se comprometió a ser más cuidadoso con la higiene.
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