El doble asesinato se presentó el pasado 13 de diciembre, a las 6 y 30 de la tarde, cuando el comerciante de esmeraldas Samir Peña departía un juego de cartas con cinco de sus familiares en el interior de uno de sus locales, una estación de combustible.
La cámara de seguridad del lugar deja ver totalmente el almacén en el que también se encontraban una mujer y dos niños.
De un momento a otro, un hombre que vestía de jean y sombrero irrumpe en el local, levanta el arma y dispara en cinco oportunidades contra el comerciante. Por respeto a la familia del señor Peña, nos abstenemos de publicar completo el momento del homicidio.
En el instante del ataque, uno de los niños queda prácticamente frente al asesino. Por fortuna, no sufrió herida alguna.
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Cuando el sicario trata de salir del lugar, dispara contra el rostro de uno de los acompañantes de Peña. Se trata de Mario Birgüez, tío de la primera víctima. Él también murió.
La confusión reinó en el local. Los familiares de Samir se trataron de proteger inicialmente del ataque y luego se percataron que tanto Peña como su tío habían muerto.
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La mujer tomó en sus brazos al niño que quedó frente al sicario y luego a una niña, y salieron del local.
La Sijín y la Fiscalía en Boyacá avanzan en la investigación del crimen. En la población hay un ambiente de zozobra por posibles retaliaciones.
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