Además de ser el centro de abastecimiento más grande del Valle del Cauca, Cavasa es la principal plaza de mercado que quedó como alternativa para los ciudadanos, luego del cierre de la galería Santa Elena, en Cali, por brote de contagio del coronavirus , que superó los 80 casos y cinco muertes en la zona.
Preparados para recibir la migración de compradores, este lugar intensificó los controles de bioseguridad, como realización de tamizajes, pruebas de olfato y encuestas al personal y a los usuarios.
Además, adecuó espacios de desinfección en los puntos de acceso, que se han reducido, para evitar que el virus se propague al interior de Cavasa.
“Verificar el funcionamiento del plan de contingencia de Cavasa para educar la población y detectar personas a quiénes hacerles la prueba y hacer un tamizaje grande”, explicó la secretaria de Salud del Valle del Cauca, María Cristina Lesmes.
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Entre tanto, las rigurosas pruebas diagnósticas y la aplicación Cali-Valle Corona tendió un cerco para evitar el ingreso de personas contagiadas a este importante punto abastecimiento ubicado en el municipio de Candelaria.
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