Dos bandas de narcos brasileños, que se disputan a sangre y fuego en ese país el negocio de las drogas, también se beneficiaron de las marchas y actos vandálicos en Colombia. Los dos carteles fortalecieron la llamada Alianza Amazónica con dos bandas colombianas, una de ellas, dirigida por alias ‘Gentil Duarte’ , a quien señalan de infiltrar las marchas.
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En un operativo, policías brasileños hallaron una caleta con droga colombiana enterrada en el patio de una casa muy cerca de la frontera con Colombia.
En el lugar encontraron casi 50 kilos de marihuana colombiana e importantes pistas que respaldan la investigación que hacían conjuntamente con la Armada Nacional de Colombia sobre la alianza entre carteles colombianos y del Brasil.
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“Especialmente con dos bandas, los Comandos Bermejo y el Cartel del Norte, estas mafias brasileñas tienen su control sobre el río Japura”, dijo el general Guillermo Castellanos, comandante de la fuerza naval del sur de la Armada Nacional.
Y uno de los mayores vendedores de drogas a las bandas brasileñas, para inteligencia de la Armada, es el cartel de alias ‘Gentil Duarte’, disidente señalado por las autoridades de enviar a sus hombres especialmente al Valle del Cauca a infiltrar las marchas y a través de actos vandálicos mostrar su poder ante otras bandas delincuenciales de la zona.
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Una estrategia, explican, que también utilizó para distraer a las autoridades colombianas mientras movía su droga desde la Amazonía hacia los carteles brasileños, especialmente.
“Muchos de estos recursos que se obtienen ilícitamente del narcotráfico están siendo utilizados por estructuras especialmente del GAO residual y del ELN para pagarles a los jóvenes para que generen esta violencia que estamos viviendo a las ciudades”, manifestó el oficial.
“Escondidos detrás de la legítima protesta han podido multiplicar exponencialmente la producción y la salida de droga, han sacado provecho de zonas donde la fuerza pública está enfocada a la persecución al narcotráfico y que ahora debe estar enfocada en atender las situaciones del paro”, dijo Iván Díaz, experto en seguridad.
Para la Armada, la cocaína y la marihuana, la venden ‘Gentil Duarte’ y sus enemigos, los del frente 48, desde Colombia a los dos poderosos carteles brasileños.
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“Esta banda internacional obtienen la marihuana tipo cripy en el departamento del Cauca. Sobre el Caquetá descubrimos que es la ruta que están utilizando ahora más comúnmente, la transportan por el río y llegan a La Pedrera, Amazonas, ahí acopian entre mil y dos mil kilogramos tipo cripy”, manifestó el general Castellanos.
Expertos lancheros contratados por los narcos son los encargados de llevar la droga. Antes de moverla permanecen varias horas entre la maraña y el río, como lo grabó un agente infiltrado de la Armada.
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Se ocultan en zona colombiana, exactamente a la orilla del río Caquetá, que tiene una extensión de casi 3 mil kilómetros.
Allí cocinan mientras llega la noche para arrancar a toda velocidad y llevar el cargamento hasta Brasil.
El infiltrado alertó a la Armada de Colombia y a la Policía de Brasil de la llegada de la droga a ese país. Entonces, los uniformados brasileños siguieron el cargamento hasta una casa en el municipio de Santarem.
Allí fue donde los traficantes enterraron la droga en el patio de una casa.
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Tras el allanamiento por agentes antinarcóticos del Brasil, encontraron 200 kilos de marihuana y 16 kilos de cocaína, avaluados en 21 millones de dólares.
También capturaron a seis señalados narcos, entre ellos, un importante sindicado mafioso colombiano conocido con el alias de ‘Paja Seca’, señalado de ser el principal enlace de las disidencias de ‘Gentil Duarte’ con alias ‘Ze Roberto’ o ‘Mano Z', uno de los jefes del Cartel del Norte en Brasil.
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Y en Colombia en ese mismo operativo internacional, la Armada capturó en Puerto Asís, Putumayo, a alias ‘Caliche’, señalado de ser uno de los más importantes hombres para el Comando Frontera del Frente 48, pues según la Armada, era el principal coordinador del tráfico de drogas con las mafias de Perú, Ecuador y México.