El coronavirus los obligó a vivir debajo de troncos, pero una mano amiga les cambió la vida

Hombres del Ejército llegaron hasta Ataco, Tolima, donde doña Edenid y sus siete hijos estaban viviendo debajo de tejas oxidadas amarradas a troncos. Allí les ayudaron a construir un nuevo hogar.

“A veces nos acostábamos nosotros los dos en el suelo, para que ellos, los niños, pudieran dormir en la cama”, cuenta doña Edenid Santofimio.

La crisis económica en medio de la pandemia del coronavirus la obligó a improvisar un techo para su familia en medio de la maleza, pues ya no contaba con recursos para pagar el arriendo de una vivienda.

Al conocer la situación, hombres del Comando de Acción Integral del Ejército Nacional se pusieron manos a la obra para conseguir los materiales necesarios y hacerle una casa.

“Es una iniciativa que trasciende en la vida de una familia necesitada, donde encuentra en la mano amiga del soldado una opción y una luz de esperanza”, expresó el coronel David Patiño, comandante del Batallón de Infantería Número 7.

La comadre de Edenid hizo también su aporte para ayudar a esta familia, pues donó el lote donde se construyó la casa.

“Decidimos donárselo para que vivieran más tranquilos y no tan amontonaditos”, dijo Marleny Vargas Leal.

Por varios días, los uniformados le construyeron su primera vivienda propia, que espera sea el primer paso para mejorar la calidad de vida de su familia.