Un desmovilizado, apodado ‘Carlos’, contó las estrategias de las disidencias de las FARC para reclutar niños.
En cuatro años dentro de la organización ilegal fue encargado de reclutar menores y planear acciones contra la fuerza pública y la población civil.
Según él, los niños que aceptan ingresar a la organización son engañados con falsas promesas: “que si no les gusta la guerrilla en 20 días, un mes, pueden salir, y es una mentira, después que estén allá no vuelven a salir”.
La estrategia es la misma en pequeños caseríos y fincas, donde sus víctimas son principalmente hijos de campesinos de escasos recursos económicos, a los que les prometen dinero para ayudar a sus familias.
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Afirma que los niños “que se quieran ir y si hacen bulla los matan, o si se dejan coger, los matan, les prometen plata; estudio no prometen porque allá estudio no dan, si dan estudio es solo política”.
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Según él, durante el tiempo que estuvo en las disidencias “recibía muchas órdenes, órdenes de ‘sicariar’, recibí la orden de matar una misma compañera, recibí órdenes de poner explosivos, pero nunca lo hice”.
Para el general Jorge Hernando Herrera, comandante de la sexta división del Ejército Nacional, esto demuestra las “acciones que de manera atrevida hacen estos bandidos con estos jóvenes que reclutan de manera forzosa, los obligan a que generen acciones contra la población mediante campos minados, tratando de intimidar también a las comunidades, a los campesinos”.
‘Carlos’, que iba a ser asesinado, logró salvarse de un consejo de guerra y huyó para someterse a la justicia.
Les pide a sus excompañeros “que elijan un camino bueno, que miren la posibilidad de salirse de allá, que es una vida muy dura, una vida que allá uno no tiene futuro”.
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En San Vicente, Solano, Puerto Rico, Cartagena del Chairá y otros municipios del Caquetá se reportan casos de reclutamiento de menores de edad.
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