Enfrentamiento entre grupos criminales deja dos muertos en Yurilla, Putumayo

Las autoridades del Putumayo verificaron en terreno la denuncia de una supuesta masacre en la comunidad de Yurilla, Putumayo. En ese territorio, varios grupos delincuenciales se enfrentan constantemente.La supuesta masacre fue denunciada por la Red de Derechos Humanos, que advirtió de una toma armada en la noche del sábado 24 de octubre, en un caserío ubicado a la orilla del río Yurilla. En esa población habitan 100 familias.“Recibimos la información de un grupo armado que entró y amarró a unas personas, eso nos dijeron unos directivos. La comunidad afirma que se escucharon disparos”, puntualizó Wilmar Madroñero, miembro de la Red de Derechos Humanos.Las autoridades revelaron que no se presentó una masacre, pero sí un enfrentamiento que dejó como saldo dos personas muertas.“En ese sector, un grupo sacó al otro y le quemaron una sastrería que tenía elementos de intendencia”, narró el general Jorge Herrera, comandante de la Sexta División del Ejército Nacional.En el lugar se enfrentaron grupos al margen de la ley identificados como Carolina Ramírez y Sinaloas.Este tipo de hechos general zozobra entre la comunidad, que queda en medio del fuego cruzado.“Un grupo armado llega y no sabe nada. Llegan botes con gente armada. Se cogieron a plomo y hubo muertos”, narró un campesino de la zona que prefirió ocultar su identidad.“Nosotros estamos muy desamparados aquí. Vivo hace 20 años aquí y el problema sigue”, expuso Marcial Muñoz, habitante de Yurilla, Putumayo.Buanerges Rosero, gobernador del Putumayo, fue hasta la zona para hacer un recorrido. Ese caserío no tiene ni alcantarillado ni acueducto. El puesto de salud estaba cerrado y la única escuela está en pésimo estado estructural.“Que esta visita no sea solamente por las situaciones que se han presentado, quiero volver a estar aquí. Cuando llegué me recibió un niño con muchas ilusiones”, dijo el mandatario.Los cuerpos de los abatidos en combate fueron trasladados a Mocoa. Entretanto, uniformados de la Policía y el Ejército hacen presencia en el sitio.