La Cámara de Representantes aprobó en último el proyecto que establece que los procesos que abra la justicia por violencia en contra de la mujer no podrán tener conciliación.
Así las cosas, los presuntos delitos de violencia contra la mujer que lleguen a los tribunales no podrán ser objeto de desistimiento.
En ese sentido, también se aumentan las penas por estos delitos. La pena privativa de la libertad por el delito de violencia intrafamiliar será la vigente de 4 a 8 años. Además, los procesos por violencia contra las mujeres podrán abrirse de oficio.
"En todos los casos en que se tenga conocimiento de la comisión de conductas relacionadas con presuntos delitos de violencia contra la mujer, las autoridades judiciales investigarán de oficio, en cumplimiento de la obligación de actuar con la debida diligencia para prevenir, investigar y sancionar la violencia contra las mujeres", cita el proyecto.
Publicidad
La representante Gloria Stella Díaz, una de las autoras del proyecto, dijo que la iniciativa pretende sensibilizar a la sociedad sobre la sanción de la violencia y la discriminación contra las mujeres. "Considero que esta es la mejor forma de reivindicar los derechos de las mujeres. La aprobación de este proyecto es una señal de que el Congreso de la República está comprometido en la lucha por combatir la violencia contra las mujeres", dijo la legisladora.
Por su parte, la senadora del Partido de la U, Dilian Francisca Toro, expresó que la iniciativa hace que en los procesos de violencia contra la mujer no exista ningún tipo de conciliación y destacó que "si ocurre algún episodio de maltrato, las mujeres pueden ir a denunciar y cuando quieran pueden quitarla, pero el proceso penal tendrá que continuar". Y agregó: "cualquier persona que vea un acto de violencia contra la mujer puede denunciar. No necesariamente la víctima".
Publicidad