La Procuraduría, a través de un comunicado, explicó que "se practicaron pruebas y se recibieron los argumentos de la defensa tanto escritas como verbales del señor alcalde mayor de Bogotá Gustavo Petro Urrego y su abogado de confianza".
Luego de analizar el material probatorio recogido, el Ministerio Público "formuló pliego de cargos al señor Petro Urrego por presuntas irregularidades en la implementación del esquema para la prestación del servicio de aseo en la capital de Colombia en diciembre de 2012".
En primer término, la Procuraduría cree que el alcalde Petro "pudo incurrir en falta disciplinaria al determinar en el segundo semestre de 2012 al director de la UAESP y a los gerentes de la EAAB y Aguas de Bogotá S. A. E. S. P para que suscribieran los contratos con el objeto de asumir la prestación del servicio público de aseo, sin tener en cuenta que dichas entidades no contaban con la más mínima experiencia y capacidad requerida para dicho fin".
Publicidad
Así mismo, dice el pliego de cargos, al mandatario local "se le imputó como segundo cargo el haber expedido el Decreto 564 del 10 de diciembre de 2012, mediante el cual se adoptó un esquema de prestación del servicio público de aseo en la ciudad de Bogotá, con el que se pudo violar el principio constitucional de libertad de empresa, al impedir que otros operadores, distintos a las entidades del Distrito de Bogotá, prestaran, a partir del 18 de diciembre de 2012 y en igualdad de condiciones, el servicio público de aseo en la ciudad capital".
Y en tercer lugar, la decisión disciplinaria cuestiona a Petro "el haber expedido el Decreto 570 del 14 de diciembre de 2012, mediante el cual autorizó el uso de vehículos tipo volquetas, decisión que pudo violar las disposiciones constitucionales y legales referentes a la protección del medio ambiente, originando un grave riesgo a la salud humana y al medio ambiente de los bogotanos".
Publicidad
Las faltas fueron calificadas como gravísimas a título de dolo en los dos primeros cargos, y gravísima con culpa gravísima para el tercero. Todas podrán ser debatidas por el alcalde en la etapa de juicio que inicia con esta decisión.
El alcalde enfrenta actualmente, además, un proceso de revocatoria. Ciudadanos y líderes políticos, inconformes con su mandato, recogieron firmas que posteriormente avaló la Registraduría y que podrían desembocar en un llamado a las urnas para que los habitantes de la ciudad definan si quieren o no a Petro como alcalde.