En el corregimiento El Mango, municipio de Argelia, las actividades tienden a retornar a la normalidad. La Policía comenzó a reconstruir lastrincheras que fueron destruidas durante la expulsión de uniformados el pasado 23 de junio . Además, inició patrullajes en la zona para garantizar la seguridad de los pobladores.
“Se ha dispuesto de unos equipos de operaciones especiales, precisamente, para hacer ese control a lo que se mueve al casco urbano, porque los pobladores nos han dicho que la amenaza es que se produzca un ataque de la guerrilla”, afirmó el comandante de la Policía del Cauca, coronel Ramiro Iván Vélez.
El oficial aseguró que ya se tiene previsto un sitio a las afueras del corregimiento, donde se acondicionará la estación de Policía. “Lo que buscamos es definir cuál es el lote donde va a quedar. Ya está el material logístico y toda la infraestructura para establecer, con todas las condiciones de bienestar y de seguridad, la policía en El Mango”, anotó.
La comunidad poco a poco comienza a retomar sus labores cotidianas, pero le pide al Gobierno Nacional que le ayude a solucionar algunos problemas. “No hemos podido iniciar clases por falta de docentes en este corregimiento y, si nos enfermamos aquí, nos tocaría morirnos porque no hay donde atendernos”, aseguró Enar Chicangana, habitante de El Mango.
Publicidad
Las actividades comerciales, agrícolas y otras propias de la región retomaron el rumbo después de siete días de registrarse la expulsión de los policías de esta localidad, cuyo retorno se produjo este fin de semana.