El llamado de los pequeños alertó a los vecinos, que se comunicaron con las autoridades. El padre está en la cárcel y la madre tenía prisión domiciliaria.
Acompañados de un comisario de familia los uniformados se encontraron que los niños estaban encerrados bajo llave, pero tuvieron un primer encuentro con los menores a través de una reja de la puerta.
“Estaban con candado, encerrados, 4 niños, 2 niños y 2 niñas, de 2, 5, 8 y 10 años respectivamente en un total estado deplorable”, señala Jorge Morales, comandante de la Policía de Ibagué.
Al ingresar a la habitación encontraron a los cuatro menores de edad, quienes según las autoridades, completaban dos días encerrados.
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Esta situación causó indignación y rechazó entre habitantes de Ibagué.
Los cuatro niños están bajo el cuidado de una madre sustituta y en las próximas horas serán entregados al Bienestar Familiar para su protección.
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