Tremendo regaño de jueza a mal vecino de Facatativá, John Leo Rocha: “Hágame el favor y se sienta”

John Leo Rocha, el mal vecino de Facatativá que ha sido denunciado por agresiones a vigilantes y a más de 50 personas en este municipio de Cundinamarca, fue capturado y presentado ante una jueza, quien lo envió a la cárcel.

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Agentes del CTI de la Fiscalía General de la Nación llegaron hasta una vivienda en el municipio de Mariquita, Tolima, para capturar a John Leo Rocha, de 47 años, acusado de agredir verbal y físicamente a sus vecinos, atacar con machete a los guardias de seguridad y un posible caso de abuso sexual.

En medio de la captura, el mal vecino amenazó a los uniformados: “¿Qué hubiera pasado? Salgo y les doy candela, me matan, pero me llevo a más de uno”.

Luego, fue llevado ante una jueza y allí, una vez más, mostró su descontento y quiso irse de la sala, por lo que la togada tuvo que llamarle la atención en varias oportunidades.

“Hágame el favor y se sienta allí, escucha en silencio. No tiene por qué estar hablando, el derecho que le asiste es a guardar silencio”, dijo la jurista, a lo que el mal vecino de Facatativá respondió: “Es que yo no tengo un abogado”.

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“Siéntese, por favor, siéntese allí”, le dijo la jueza, pero él le contestó que “no, yo no voy a estar en la audiencia, doctora”.

Tras varias interrupciones del capturado, la audiencia comenzó y allí la fiscal del caso narró una a una las denuncias de más de 50 víctimas.

Mientras tanto, John Leo Rocha seguía agresivo y en plena audiencia intentó golpear a los agentes del CTI usando un extinguidor.

“¿Cuál es la maricada o qué? Ahora sí que tranquilo, ¿cuál tranquilo? Ahora sí para que me judicialicen, ¿qué tal? No sea hijue…, tras de que se metió a la casa ¿y qué?”, les recalcó.

La diligencia transcurrió en medio de interrupciones y amenazas por parte de John Leo Rocha, a quien la jueza decidió enviar a la cárcel al representar un peligro para la sociedad y ya, resignado, el hombre cabizbajo escuchó la decisión.

Tras el fallo, el mal vecino de Facatativá salió esposado, en silencio y fuertemente custodiado a su lugar de reclusión.