Tres menores de edad, cuyo pronóstico es reservado, fueron trasladados a los hospitales Internacional de Colombia y Universitario de Santander por la gravedad de sus heridas, tras la explosión que se registró el sábado 1 de octubre en el barrio Pozo 7 de Barrancabermeja, Santander.
Dos personas murieron y dos más están desaparecidas por la onda expansiva que desató la explosión de 14 cilindros de gas.
El alcalde de Barrancabermeja, Alfonso Eljach, informó que aún es materia de investigación las causas de la detonación, “hasta el momento no podemos definirlas de manera puntual”, pero sí descartó que se tratara de un atentado terrorista.
El funcionario también señaló que la mayoría de los establecimientos comerciales de la zona ya se habilitaron para trabajar, pero “algunos de ellos van a tener un cierre temporal”.
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Sobre las 83 casas afectadas en Barrancabermeja, dijo que “más del 90% tienen reparaciones de techos, a las cuales vamos a entregar tejados”.
No obstante, están evaluando cómo ayudar a los habitantes de seis viviendas que sufrieron daños serios. Por ahora se contempla darles tres meses un auxilio de vivienda.