
Cuando se piensa en el consumo energético doméstico, uno de los primeros aparatos que suele mencionarse es la nevera. Esto tiene sentido: permanece enchufada y funcionando las 24 horas del día, los siete días de la semana, para conservar los alimentos. Sin embargo, no es el electrodoméstico que más electricidad demanda, pues hay otro dispositivo que, aunque se usa por períodos más cortos, genera un gasto energético mucho mayor cada vez que se enciende.
Y es que según recomendaciones de Enel Colombia, uno de los errores más comunes es dejar conectados los electrodomésticos cuando no se están utilizando. Esto genera lo que se conoce como consumo fantasma: aparatos apagados que siguen consumiendo energía en su hogar, y que pueden representar hasta un 8% del valor total de la factura mensual. Para evitar este gasto invisible, los expertos aconsejan desconectar los equipos cuando no estén en uso y realizarles mantenimiento frecuente, pues un electrodoméstico limpio y en buen estado funciona con mayor eficiencia, y suele durar más.
El electrodoméstico que gasta más energía que 100 computadoras encendidas
Hay un artefacto que casi todos tienen en casa y que se usa para preparar cenas o calentar el almuerzo. Se trata del horno eléctrico, que en una sola hora puede gastar lo mismo que 100 computadores funcionando al mismo tiempo. De acuerdo con lo publicado en el portal Renewable Energy World, los electrodomésticos de cocina suelen consumir hasta un 1,3% del consumo total de luz en el hogar y aparatos como el horno eléctrico y la nevera suelen hacer parte de este gran consumo.
Según estimaciones publicadas por el sitio MyAppliances, un horno eléctrico puede consumir entre 2000 y 5000 vatios por hora, dependiendo del modelo, su tamaño y la potencia seleccionada. En términos mensuales, si se utiliza de forma habitual, este consumo puede alcanzar entre 40 y 90 kilovatios-hora, una cifra que, en el acumulado, puede representar una porción significativa del gasto eléctrico total de una vivienda. De hecho, los especialistas en eficiencia energética recomiendan prestar atención a la frecuencia con la que se emplea este aparato por su mismo gasto en el recibo de la luz.
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"En comparación con otros electrodomésticos de cocina, los hornos generalmente consumen más electricidad que los microondas o las teteras, pero menos que los refrigeradores, que funcionan continuamente. Por lo que, si busca un horno nuevo, considere invertir en uno con funciones de eficiencia energética. Los hornos modernos pueden incluir tecnología inteligente, lo que permite un control más preciso de los tiempos y temperaturas de cocción, lo que puede ayudar a reducir el consumo de energía", se lee en el sitio web.
El computador, a diferencia del horno, tiene un consumo muy bajo
Por otro lado, un computador portátil estándar, utilizado para tareas comunes como navegar por internet, redactar documentos o asistir a clases virtuales, consume entre 30 y 50 vatios por hora. Eso equivale a un gasto energético de entre 0,03 y 0,05 kilovatios hora (kWh) por cada hora de uso. Esto, de acuerdo con el portal mencionado anteriormente, es un consumo bajo, razón por la cual se considera uno de los aparatos más eficientes dentro del hogar moderno. El portal de Renewable Energy World, explica que los equipos informáticos consumen tan solo el 1,1% de la energía en el hogar, incluso puede que menos.
A diferencia del computador, el horno necesita calentar resistencias metálicas a temperaturas muy altas y mantener ese calor constante, lo que representa una mayor demanda energética. Por lo tanto, al dividir el consumo del horno entre el de una laptop, se obtiene que 3,5 kWh dividido entre 0,035 kWh da como resultado 100, lo que significa que el gasto energético de un solo horno eléctrico encendido durante una hora equivale al de 100 computadores funcionando al mismo tiempo durante un mismo periodo.
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Esto puede ser significativo por hora, pero si se habla de un consumo acumulado, la energía que se consume mes a mes, este valor puede cambiar. A pesar de que el consumo por hora calcula la cantidad de energía que ambos aparatos utilizan durante el mismo período de tiempo, el acumulado depende de cuántas horas por día y cuántos días al mes se utiliza cada aparato. Por ejemplo, un computador que se usa ocho horas diarias todos los días del mes puede terminar consumiendo unos 6 kWh mensuales. Por otro lado, si un horno se enciende solo cinco veces por semana durante una hora, podría llegar a consumir entre 40 y 90 kWh en ese mismo mes, por lo que todo depende de la frecuencia en la que se usen estos aparatos.
Factores que influyen en el consumo energético del horno eléctrico
- Tamaño del horno: Un horno grande necesitará más energía para alcanzar y mantener una temperatura alta, debido al mayor volumen interno que debe calentarse. Los hornos compactos consumen menos por tener menos espacio que calentar.
- Potencia eléctrica: La mayoría de los hornos domésticos tienen una potencia que oscila entre 2000 y 5000 vatios. Cuanto mayor sea la potencia, más electricidad consume por cada hora de funcionamiento.
- Tiempo de uso y temperatura seleccionada: Cocinar a temperaturas más altas o durante más tiempo genera un mayor consumo. Hornear a 220 °C durante 90 minutos, por ejemplo, requerirá bastante más energía que cocinar a 180 °C por 30 minutos.
- Funciones adicionales: Algunos modelos tienen ventiladores, autolimpieza, aislamiento mejorado o modos de cocción optimizados. Estas funciones pueden contribuir tanto al aumento como a la disminución del consumo eléctrico, según su uso.
- Consumo en modo de espera: Algunos hornos modernos, aunque están apagados, siguen conectados a la corriente y consumen energía para mantener funciones como el reloj o el sistema de programación. Aunque este consumo es bajo, puede acumularse a lo largo del tiempo.
¿Cómo reducir el gasto del horno eléctrico?
- Evite precalentamientos innecesarios: Solo se debe precalentar cuando la receta lo exige específicamente, pues muchos platos toleran bien una cocción gradual desde el inicio.
- Cocine más de un plato al mismo tiempo: Si es posible, preparar varios alimentos simultáneamente permite aprovechar el mismo tiempo y temperatura.
- Apague antes de tiempo: Unos minutos antes de que termine el tiempo estimado, apague el horno y deje que el calor acumulado finalice la cocción.
- Use recipientes adecuados: Los recipientes de vidrio y cerámica retienen el calor mejor que los metálicos, ayudando a reducir el tiempo o la temperatura necesaria.
- Asegure un buen aislamiento: Las gomas de la puerta deben estar en buen estado para evitar pérdidas de calor que obliguen al horno a seguir calentando más tiempo.
VALENTINA GÓMEZ GÓMEZ
NOTICIAS CARACOL
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