Una tortuga marina, de 30 centímetros de largo y 2 kilos de peso, detuvo el tráfico aéreo en el aeropuerto de Narita, en Japón . Estaba muy campante dando un paseo por una de las pistas de aterrizaje.
Su recorrido obligó a paralizar las actividades del aeropuerto y cinco vuelos terminaron retrasados por cuenta de esta tortuga marina que, al final, fue retirada de la pista y entregada a las autoridades ambientales.
Se cree que pudo haber escapado de su estanque en una reserva animal cercana.
Lo cierto es que, a paso lento, este reptil aventurero logró llamar la atención y se volvió viral en las redes sociales .
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