Un autobús que transportaba a los invitados de una boda se volcó y mató a 10 personas en un accidente nocturno "inimaginable" mientras viajaba por una zona vinícola al norte de Sydney, Australia, dijo la policía este lunes, anunciando una serie de cargos contra el conductor.
El autocar blanco de Linq Buslines transportaba a 35 pasajeros de una boda en una bodega local cuando volcó sobre su lado izquierdo el domingo por la noche y se detuvo en el pavimento junto a las barreras en la entrada de una rotonda importante.
La policía dijo que había acusado a un hombre de 58 años de 10 delitos relacionados con la conducción peligrosa o negligente que "ocasionó la muerte" y le negaron la libertad bajo fianza antes de una audiencia en la corte en el cercano Cessnock, al sur de Australia, que será el día martes.
Una docena de trabajadores de emergencia con chalecos amarillos de alta visibilidad estuvieron en el lugar poco después del accidente en una noche de niebla cerca de la ciudad de Greta, ayudando a transportar a más de 20 personas al hospital.
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Entre los que aún están en el hospital, un paciente estaba en estado "crítico" y otros 20 estaban "estables", dijo la policía.
Después de un esfuerzo de un día, todavía se estaban recuperando cuerpos de la escena.
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Las fotos de la boda compartidas en las redes sociales mostraban a los sonrientes invitados de la fiesta reunidos en el césped de una bodega local para celebrar, solo unas horas antes del accidente, el más mortal registrado en los registros oficiales de Australia, desde 2007.
La subcomisionada interina Tracy Chapman describió una "escena frenética" después del accidente.
Los servicios de emergencia "pudieron romper el parabrisas delantero del autobús para sacar a algunas personas o ayudar a algunas personas a salir del autobús", dijo.
"Los que pudieron, caminaron solos". Se cree que no hay niños involucrados, agregó.
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Presuntamente, los pasajeros se dirigían a su alojamiento después de las festividades, dijo Chapman.
Ningún otro vehículo parecía haber estado involucrado en el accidente, dijo.
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La policía se negó a discutir la posible causa del accidente.
'Cruel y triste'
"Que un día feliz como ese en un hermoso lugar termine con una pérdida de vidas y lesiones tan terribles es tan cruel, triste y tan injusto", dijo el primer ministro Anthony Albanese en Canberra.
"La gente contrata un autobús para bodas para mantener seguros a sus invitados, y eso solo se suma a la naturaleza inimaginable de esta tragedia".
Albanese, primer ministro de Australia, envió sus deseos por la recuperación de los hospitalizados y agradeció a los trabajadores de emergencia.
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"Quiero dar las gracias a los socorristas, a los que llegaron a esta terrible escena. No puedo imaginar a qué se enfrentaron, con qué tuvieron que lidiar", dijo.
La zona está siendo examinada por policías forenses especializados y una Unidad de Investigación de Choques.
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La región de Hunter Valley está repleta de viñedos, canguros y matorrales nativos, lo que la convierte en un lugar popular para turistas y salidas en grupo.
El primer ministro de Nueva Gales del Sur, Chris Minns, envió su "más sentido pésame" a las familias y seres queridos de los muertos y heridos.
Los invitados a la boda se reunieron para experimentar un "día de alegría" y, en cambio, se encontraron con una "desesperación innegable", dijo a los periodistas.
"Los próximos días y las próximas semanas pueden ser peores que el impacto inicial, ya que se da cuenta de lo que ha pasado esta comunidad".
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