Estado decidió entierro del capitán muerto por presunta tortura en Venezuela sin consultar a familia

Por primera vez y doce días después de su muerte, los allegados fueron citados para reconocer el cuerpo, pero se les negó decidir los actos fúnebres.
En medio de un fuerte operativo de seguridad fue sepultado el cuerpo del capitán de corbeta Rafael Acosta Arévalo en el cementerio del este, en contra de la voluntad de la familia.
“Denuncio el procedimiento ilegal que está haciendo la morgue de Bellomonte, donde va a hacer la entrega controlada del cuerpo de mi esposo como lo hicieron con Óscar Pérez”, manifestó Waleswka de acosta, esposa del capitán.
La familia deseaba enterrarlo en Maracay, sin embargo, por orden de un tribunal se realizó la inhumación controlada.
El capitán de corbeta murió el pasado 29 de junio, 8 días después de haber sido detenido por funcionarios de inteligencia militar, acusado de presunta conspiración.
La autopsia refleja más de 30 lesiones y hematomas.
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