José Humberto Cuéllar Ferrara es un famoso médico mexicano cuyo nombre resuena hoy en los medios de comunicación de su país y Colombia, no porque haya realizado alguna cirugía innovadora o haya salvado heroicamente una vida, sino a raíz de un cruel crimen que lo salpica y por su captura en un puesto de arepas de Santander.
La historia de este cirujano se manchó de sangre el 11 de junio de 2004, cuando falleció de forma trágica Norma Patricia Ayala, una enfermera de 30 años y paciente suya. La mujer fue asesinada, en una vía pública de México, luego de denunciar al galeno por mala praxis médica, acoso sexual y amenazas de muerte.
(Lea también: le mostramos acá el informe en video sobre la captura del médico mexicano en Santander)
La víctima había recurrido a Cuéllar para realizarse una liposucción. El resultado, sin embargo, no fue el mejor y ella denunció no solo una operación fallida, sino también acoso de tipo sexual por parte del médico. Pocos días después de alzar su voz, advirtió que estaba siendo intimidada. Lamentablemente, las amenazas se hicieron realidad: la silenciaron.
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Norma Patricia Ayala fue asesinada a tiros en el barrio San Ignacio de Iztapalapa. Un sicario la interceptó y le disparó en, por lo menos, dos ocasiones. En su Facebook, había escrito: "Todos los días, al salir de mi domicilio para ir al trabajo o realizar otras actividades, tengo miedo e intranquilidad de que atenten contra mi vida. Hago responsable al dr. José Humberto Cuéllar Ferrara de todo lo posible que pueda afectar mi integridad física y mental. Muero de miedo de saber que el doctor atente contra mi vida para solucionar el problema, ya que es evidente que lo que me hizo será sancionado".
Las miradas apuntaron de inmediato hacia José Humberto Cuéllar, como presunto determinador del crimen. El sujeto, entonces, desapareció de México. Según las autoridades de esa nación, el 19 de junio emprendió su huida, cruzando inicialmente la frontera con Guatemala por tierra. Desde allí, abordó un vuelo hacia Bogotá y terminó instalándose en Floridablanca, municipio de Santander, donde montó un puesto de venta de arepas junto a su pareja sentimental.
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Familia de la víctima clama justicia
"Una vez esta persona es denunciada por estos hechos, logra evadir a las autoridades mexicanas y se desplaza a nuestro territorio, especialmente al departamento de Santander, en Floridablanca, donde se logra a través de un proceso investigativo con todas las capacidad llegar a este sitio", precisó el coronel Hebert Mejía, director de investigación criminal e Interpol en Colombia.
En un sencillo local del sector de Cañaveral, el prestigioso cirujano intentó rehacer su día a día. Lejos de su país, en el anonimato, creyó que lograría evadir a la justicia. Pero la Dijín de la Policía, en un operativo conjunto con las autoridades mexicanas, lo localizó y lo capturó. Será extraditado.
"En este momento la persona se encuentra en trámites administrativos para lograr su extradición. Lo ha requerido un juzgado de control del sistema procesal penal acusatorio de la Ciudad de México por los delitos de abuso sexual agravado, acoso sexual, lesiones culposas y responsabilidad profesional", agregó el general Mejía.
La familia de Norma Patricia Ayala espera que José Humberto Cuéllar Ferrara responda por lo que hizo y que la sentencia sea ejemplar.
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