Una merienda con su familia acabó en unadelicada situación médica cuando una niña
en Australia ingirió un pedazo de alambre en un rollo de huevo con tocineta. La menor terminó en el hospital y su madre compartió la historia para evitar que otros sufran situaciones similares.
Kristen Saunders, una madre de Nueva Gales del Sur, contó que su hija de 9 años debió ser llevada de emergencia al hospital, luego que la menor se mostrara desorientada e incapaz de reconocer a su propia familia poco tiempo después de consumir un bocadillo de huevo y tocineta.
"Estaba masticando y luego empezó a sentir que se estaba ahogando... Creo que, como la mayoría de los padres, decimos: 'Estarás bien, toma un poco de agua y se calmará'", comentó Saunders a ABC.
Aunque en un principio pensó que era una simple molestia, la menor seguía teniendo dolor de garganta. Sin embargo, su médico de confianza les dijo que simplemente tenía una fiebre.
"Hubo un día en particular que estaba en casa con ella y de repente estaba un poco confundida al responder preguntas. Llamé al médico y dijo que fuera directamente al hospital", relató la madre.
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Al llegar al centro médico, la menor se tropezaba y estaba sin orientación, y, tras unos exámenes, identificaron que tenía abscesos en el cerebro producidos por una cerda de alambre de un capillo para barbacoa que había entrado a su sistema por medio del alimento con huevo.
El pedazo de la herramienta de limpieza atravesó el esófago de la menor y penetró en la arteria carótida de su cuello, por lo cual debió ser trasladada en helicóptero al Westmead Children's Hospital en Sydney para ser operada de emergencia.
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La intervención quirúrgica fue exitosa y tras un par de meses de tratamiento, la menor que terminó en el hospital pudo recuperarse y volver a sus actividades deportivas.
"Es algo que no sucede tan a menudo, pero sucede con frecuencia y odiaría que alguien más pasara por algo como esto", comentó Saunders al compartir la historia.
Expertos recomendaron revisar constantemente las herramientas y utensilios de cocina para evitar que estos se adhieran a la comida y terminen en quebrantos de salud para los consumidores.