Los números dados por la Procuraduría son hasta el 31 de diciembre de 2017 y desconocen el trabajo realizado este año, según la EPS.
Medimás aceptó los llamados de intervención hechos por el Ministerio Público, pero afirmó que las acusaciones no corresponden con el momento que está viviendo la entidad.
"Es importante destacar que la fotografía de los datos entregados por los entes de control refleja la realidad hasta el pasado 31 de diciembre de 2017, a solo 5 meses de haber iniciado la operación de la compañía, y no reconoce los avances que se han presentado en el 2018", declaró Néstor Arenas, presidente de la cuestionada EPS.
La prestadora de salud también aseguró que se han resulto el 94% de las peticiones en cuanto a los servicios de los pacientes.
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Desde la Superintendencia de Salud se anunció que por el momento no se intervendrá a la entidad, pero que se continuará con la vigilancia especial a la que está sometida.
En la actualidad, la Supersalud ha abierto dos investigaciones en contra de Medimás, una de las cuales impuso una multa por más de 1.100 millones de pesos. Además, se le asignó un contralor que removió inmediatamente al revisor fiscal.
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Luis Fernando Cruz, superintendente de Salud, afirmó que se le debe asegurar las garantías a la EPS: “No podemos nosotros con declaraciones públicas, sin arriesgarnos a vulnerar el debido proceso, tomar unas decisiones precipitadas”.
Sin embargo, Cruz recordó que prima los derechos de los 4 millones de afiliados: "Queremos transmitirles a los usuarios que está la posibilidad de ejercer su derecho a la libre elección para escoger la EPS que se ajuste a sus expectativas”.
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