"La salida de los menores es la prioridad una vez entren las FARC a las zonas", afirmó Sergip Jaramillo.
El funcionario explicó que, una vez concentrados, los rebeldes deben recoger "rápidamente" la información sobre los niños y adolescentes en sus tropas y entregarla al gobierno para que estos sean llevados a 10 zonas de transición donde serán evaluados y se establecerá la ruta para su reincorporación.
Jaramillo no precisó cuántos menores de 18 años hay en las FARC, aunque en mayo pasado el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas, habló de cerca de 170.
Según el comandante guerrillero Pastor Alape, encargado por las FARC para este tema, en las filas rebeldes hay cerca de 23 menores de 15 años.
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"Estamos listos para recibir a todos los menores de edad que se encuentren en las filas de las FARC", aseguró por su parte Paula Gaviria, Consejera Presidencial para los Derechos Humanos, entidad que liderará la reinserción de los niños y adolescentes.
En el pacto de paz firmado en noviembre se estableció un plan transitorio de acogida para desmovilizar a los menores, que incluye valoración preliminar de salud, identificación y recepción. Este proceso cuenta con participación de Unicef.
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Además, las partes aprobaron este jueves los principales lineamientos del nuevo programa para el restablecimiento de derechos, reparación, reincorporación e inclusión social de los menores, a cargo de la oficina de Gaviria.
Entre 2002 y 2014 se desmovilizaron unos 4.500 menores de edad de grupos armados ilegales, 65% de los cuales pertenecía a las FARC, según cifras oficiales.