Argumenta que pone en riesgo la financiación del sistema de salud y las contribuciones que benefician a 4.4 millones de afiliados.
Además, el Gobierno considera que la medida es inequitativa pues se le descontaría el mismo porcentaje, es decir el 4%, a una persona sin importar el monto que devenga.
"Este Congreso, que aprobó la reforma tributaria, estaba esperanzado que ese sentido social no se perdiera por parte del presidente, en especial cuando fue un compromiso de campaña. Estas objeciones las vamos a estudiar, yo espero que el Congreso de la República no las acepte y que sea la Corte Constitucional la que tenga la última palabra", comentó Mauricio Lizcano, al rechazar la objeción presidencial.