La crisis humanitaria en el Chocó crece con cada día del llamado paro armado del ELN. El alcalde de Sipí califica la situación como un secuestro, mientras la Procuraduría dice que 25.000 personas sufren los efectos de esta situación.
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Además, un fuerte golpe en la economía han recibido los habitantes de Istmina en los últimos meses tras cinco paros armados del ELN y Clan del Golfo.
“Porque la economía más que todo depende de la minería y el fuerte está en la parte de abajo del San Juan", explica Elías Quinto, comerciante afectado.
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Por su parte, otra comerciante, Rosa Palacios, cuenta que, aunque diariamente puede vender hasta 30 raciones de plátano, en las últimas horas apenas pudo comercializar media.
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Por el río San Juan suben y bajan hasta 100 botes diariamente con provisiones del sur del Chocó. Sin embargo, la actividad se ha visto seriamente paralizada desde que hay restricción en la movilidad y las más afectadas son las familias que viven en las riberas de este importante afluente.
La situación “es crítica, solo están tomando alimento una vez al día porque hay desabastecimiento”, sostuvo Yober Cuesta, personero de Istmina.
El alcalde de Sipí, Juan Rivas, dice que el confinamiento de hoy es peor que en la pandemia: “La gente está cohibida, secuestrada, estancada, aguantando hambre, simplemente recibiendo lo que le puede llevar la Administración. Hoy la gente ya no puede salir de las casas ni a buscar el pancoger”.
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Ante la crisis, una comisión especial de la Procuraduría llegó al Chocó para atender la situación, donde se estima que más de 25.000 personas están confinadas.
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“Son cerca de un equipo de 25 investigadores para ayudar a darle prioridad de capturar a quienes están dirigiendo esos comportamientos delincuenciales”, señaló el general William René Salamanca, director de la Policía Nacional.
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“El departamento no tiene los recursos con qué atender a esta situación, las alcaldías tampoco y el Gobierno no hace presencia”, subrayó Jefferson Mena, procurador para asuntos étnicos.
¿Qué dice el Gobierno?
Luego de nueve días de esta nueva crisis por el conflicto en el Chocó, se pronunció el Gobierno nacional. Lo hizo a través del ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, quien anunció acciones para recuperar el control de la zona, pero también realizó un duro cuestionamiento al ELN por estas acciones contra la población civil.
"Bloquear a una población, pues es completamente la antítesis de mandar mensajes de convivencia. Yo quiero recordarle al ELN que un proceso de paz lo puede negociar el Gobierno con una organización insurgente, pero lo valida es la sociedad y la sociedad frente a estos hechos evidentemente genera un rechazo", dijo Luis Fernando Velasco.
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