Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Jesús Hernán Orjuela, conocido como el padre Chucho, sufrió un grave susto cuando visitaba la zona de Quevedo, en Ecuador. De acuerdo con información preliminar, el sacerdote estaba en ese país en compañía de otro cura, con quien viajaba en una camioneta.
En la noche de este 28 de octubre, tras realizar algunos encuentros espirituales, los sacerdotes fueron cerrados por otro vehículo, desde el cual les dispararon. Preliminarmente, las autoridades plantean que se intentó de un atraco.
Se conoció que Orjuela viajaba por la carretera que comunica a Guayaquil y Quevedo, pues estaba de visita por la invitación de una comunidad católica en Ecuador. El padre Chucho contó que varios delincuentes interceptaron la camioneta en la cual viajaba. En la misma se movilizaba otro cura y el conductor del carro.
En el instante menos pensado, otro carro los pasó, los cerró y los delincuentes dispararon contra la camioneta. El sacerdote colombiano dijo que fue el peor susto de su vida. “Pasamos una noche muy difícil con este incidente”, mencionó.
En su relato tras el ataque, el padre Chucho dijo que quienes estuvieron detrás de los disparos “son personas de delincuencia que secuestran” y explicó que los encerraron en la camioneta. “Seis personas bajaron disparándonos y Dios nos ayudó. Yo creo en Dios, pero hoy veo que hay una coraza, era como una coraza de hierro, porque yo veía las balas de frente para nosotros y no nos impactó ninguna. Pudimos con la ayuda de Dios salir”, contó.
En su relato, Orjuela contó que el conductor reaccionó de manera rápida, logrando escapar del ataque. Sin embargo, los delincuentes los persiguieron por varios minutos, hasta que consiguieron huir, regresar a Guayaquil y dar el aviso a las autoridades. “Por la gracia de Dios pudimos hacer una maniobra rápida, darnos la vuelta y regresar hasta el peaje más próximo”, añadió Ricardo Muñoz, conductor del carro donde se movilizaban los sacerdotes.
Publicidad
En diálogo con Noticias Caracol, el padre Chucho dijo que los asaltantes se movilizaban en una camioneta de platón y manifestó que "sintió algo muy feo" cuando los pasaron. "Venían cubiertos, ahí fue cuando atravesaron la camioneta y comenzaron a disparar", señaló.
En esos momentos de pánico, el sacerdote contó que pensó en lanzarse del carro, pero finalmente la pericia del conductor para eludir a los delincuentes lo detuvo. El transportador Ricardo Muñoz también contó que este tipo de asaltos son frecuentes en esa vía de Ecuador.
Publicidad
El padre Julio Villacrés, quien viajaba con Orjuela, narró que fueron muchos disparos y agradeció a Dios de que no les pasó nada a ellos ni al carro. "Creo que actúo el señor", mencionó. Las autoridades de Ecuador están investigando el caso denunciado por el colombiano, quien resultó ileso. Según los relatos, los delincuentes de la camioneta de platón también habrían atacado a otros carros que se movilizaban por esa carretera.
NOTICIAS CARACOL