Algunos trabajan sembrando papa, maíz y caña o recolectando calabaza y flores. La mayoría son latinos y haitianos que temen ser deportados.
Muchos llegaron hace varias décadas huyendo de la violencia de sus países, otros buscando un futuro mejor. Tuvieron familia, hicieron su vida y aunque no hablan ni entienden el inglés, se convirtieron en la mayor fuerza trabajadora de este sector en Estados Unidos.
Según la Secretaria de Trabajo, los inmigrantes son el 16,7% de la población trabajadora de ese país y son sectores como agricultura, construcción, hotelería, minería, transporte y otras más, donde los latinos representan la mayor parte fuerza laboral.