El electrodoméstico llegó a la chatarrería de Lilian Argueta, en EE. UU., hace un mes, luego de que su dueño fuera hallado muerto dentro de su apartamento.
Cuando Argueta abrió la puerta del congelador descubrió el cuerpo de una joven que había desaparecido hace casi seis años.
Se trataba de Heather Anne Lacey, madre de dos niños y que, según su familia, tenía problemas de adicción después de la cesárea de su segundo embarazo.
"Pensé que era una bruja o un maniquí (…) Pensé: 'No puede ser una persona', pero había un mal olor", dijo Argueta sobre el macabro hallazgo, de acuerdo a lo informado por Sun Sentinel.
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Las causas de la muerte de Lacey, buscada desde diciembre de 2013, no han sido aclaradas, pero sí se estableció a quién pertenecía el congelador donde abandonaron su cuerpo.
Se trata de Jonathan Escarzaga, un hombre de 36 años cuyo cuerpo encontraron en su apartamento en estado de descomposición, sin que se pudiera determinar qué causó su deceso.
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El administrador del edificio empezó a remodelar el sitio e hizo que se llevaran las pertenencias de Escarzaga, entre ellas el congelador donde encontraron a Lacey.
El electrodoméstico terminó en el almacén de Argueta, en el condado de Broward.