

Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
Por primera vez en más de 100 años, el sepulcro de Santa Teresa de Jesús ha sido abierto para su veneración pública. El evento, que comenzó el 11 de mayo de 2025 en la Basílica de la Anunciación de Nuestra Señora del Carmen en Alba de Tormes (Salamanca). La última vez que se permitió el acceso visual a los restos de la santa fue en 1914, pero entonces se trató de una apertura privada y breve. Esta vez, el acceso será público y se extenderá hasta el 25 de mayo.
El cuerpo de la santa, considerado incorrupto por la tradición católica, se encuentra protegido por una lámina de vidrio transparente. La exposición ha sido organizada por la Orden del Carmelo Descalzo y cuenta con el respaldo de autoridades eclesiásticas y civiles.
El acto inaugural fue presidido por el obispo de Salamanca, José Luis Retana, y contó con la participación del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, quien entregó una litografía conmemorativa de las nueve fundaciones teresianas en la región.
Publicidad
Este acontecimiento no solo tiene una dimensión espiritual, sino también histórica y cultural. Santa Teresa de Jesús, nacida en 1515 y fallecida en 1582, es una de las figuras más influyentes del misticismo cristiano y la literatura española. Fue canonizada en 1622 y proclamada Doctora de la Iglesia en 1970. Su legado sigue vivo en sus escritos, en las comunidades carmelitas que fundó y ahora, de forma tangible, en esta oportunidad única de venerar sus restos.
Aunque el sepulcro ha sido abierto en ocasiones anteriores (como en 1760 para el traslado de sus restos a una urna real, o en 1914 con motivo del cuarto centenario de su nacimiento) nunca antes se había permitido una veneración pública de esta magnitud.
Publicidad
El prior de los Carmelitas Descalzos de Alba de Tormes, Miguel Ángel González, ha subrayado que este acto debe ser entendido desde una mirada contemplativa, como la que tenía la propia santa, para recibir el “regalo espiritual” que ofrece “con el testimonio de su vida, la riqueza de sus escritos, la grandeza de sus huellas, como mujer, como santa y como doctora”. afirmó
La exposición ha sido cuidadosamente preparada para garantizar el respeto y la conservación de los restos. Se han implementado medidas de seguridad, control de acceso y protocolos litúrgicos para acompañar la experiencia de los visitantes. Además, se han programado actividades paralelas como conferencias, visitas guiadas y momentos de oración comunitaria.
La localidad salmantina de Alba de Tormes, donde falleció Santa Teresa, se convierte durante estos días en un centro de peregrinación internacional. La basílica que acoge sus restos fue construida precisamente para custodiar su sepulcro, y ahora se transforma en un espacio de encuentro entre historia, fe y cultura.
En este sentido, Miguel Ángel González ha expresado que Santa Teresa de Jesús es para todos patrimonio de la humanidad y que todo aquel que se acerque a ella en estos días saldrá enriquecido. Son días que desde la orden esperan que sean de acción de gracias por la grandeza y riqueza de Santa Teresa en Alba de Tormes, ya que ella "invita a la paz, al encuentro con Jesucristo, a la unidad y a la alegría con un gracejo que siempre manifestó en sus escritos y en su vida", ha añadido.
La ceremonia ha comenzado a las nueve de la mañana de este domingo 11 de mayo, con un acto simbólico de apertura previo a la veneración bajo la presidencia del obispo de Salamanca, José Luis Retana; el superior provincial de los carmelitas Descalzos en España, Francisco Sánchez Oreja, y otras personalidades como el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
Fernández Mañueco ha declarado que Santa Teresa le ha marcado de manera personal, y la ha definido como una mujer adelantada a su tiempo, no solo en su forma de vivir, en su entrega o en su vida interior, sino que también fue un ejemplo "con su vida, con su forma de escribir, con su forma de orar y de rezar".
Tras el acto de lanzamiento han tenido lugar unas palabras de bienvenida por parte de la comunidad carmelita, seguido por la entrega de la Llave de la Basílica como signo de apertura espiritual y comunitaria para a continuación, dar lugar a una oración seguida de un momento de silencio.
Publicidad
El acto ha finalizado con el tañido de campanas y la apertura de las puertas a los peregrinos y visitantes para el inicio de la veneración. Durante los siguientes quince días, la basílica permanecerá abierta desde las 9:00 a.m. hasta las 11:00 p.m. para acoger a peregrinos, fieles y visitantes que deseen acercarse al sepulcro de la santa, participar en celebraciones litúrgicas, actos culturales y espacios de oración.
EFE
DANNA SOFÍA SUÁREZ G
PERIODISTA DE NOTICIAS CARACOL
DSSUAREZ@CARACOLTV.COM.CO
Publicidad