Luego de un abrazo con el mandatario de Colombia, Iván Duque, que selló el inicio del Encuentro 24 de la Jurisdicción Ordinaria, el presidente de la Corte Suprema de Justicia, Luis Antonio Hernández, pronunció un duro discurso que los distanció.
El magistrado defendió las decisiones de los jueces, algunas criticadas por el propio Gobierno nacional.
“El problema no es que se critiquen las decisiones de los jueces, sino que se haga con mentiras, con campañas de aniquilamiento moral contra los funcionarios judiciales, con acusaciones infundadas de que somos manipulados por algún sector político”, dijo.
Cuestionó que la responsabilidad de la inseguridad y la impunidad recaiga en el sistema judicial. Estas declaraciones surgen tras la radicación, en el Congreso de la República, del proyecto que busca fortalecer la seguridad ciudadana a través del incremento de penas.
“Se cree que, con dictar una ley o tipificar conductas, se enfrentan los agudos problemas de la sociedad y que allí termina la responsabilidad de los poderes públicos”, sostuvo.
Por su parte, el presidente Iván Duque aunque reconoció la importancia del sistema de justicia, tiene sus reparos.
“Si queremos una sociedad más fuerte en la convivencia, tenemos que derrotar el relativismo moral que nuestra historia ha llevado a que las más crudas expresiones de violencia no hayan tenido una sanción proporcional”, afirmó.
El presidente de la Corte Suprema de Justicia reconoció que, por iniciativa gubernamental, el Congreso aumentó, en el presupuesto, un 3% los recursos para la justicia, pero pidió duplicar la cantidad de jueces.
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